Cómo tratar la fiebre de recién nacidos y bebés

La fiebre significa que el cuerpo de tu hijo está luchando contra una infección. La fiebre por sí misma no significa que el niño está gravemente enfermo. Una fiebre media a baja es parte del mecanismo de defensa del cuerpo para las enfermedades menores más comunes de la infancia.

La fiebre en un bebé

Una fiebre en un niño pequeño debe ser tomada con seriedad. Las temperaturas rectales superiores a 38 °C (100,4 °F) se consideran elevadas. No es aconsejable utilizar un termómetro de oído a esta edad.

Lo que puedes hacer

Si la temperatura del bebé es alta, quítale una capa de ropa y controla nuevamente su temperatura en 15 a 20 minutos. Si no volvió a ser normal en ese tiempo, llama a tu médico.

Qué le debes decir a tu médico

Infórmale si tu bebé está comiendo bien, si es fácil despertarlo, alertarlo o si muestra algún otro signo de enfermedad. Menciónale si tu bebé ha estado expuesto a alguna enfermedad en la última semana o dos semanas, y si tiene problemas de salud crónicos.

La fiebre en un bebé mayor o un niño pequeño

Como regla general, las fiebres de más de 39,4 °C (103 °F) indican una enfermedad más grave que las fiebres de menos de 39,4 °C, pero el comportamiento del niño enfermo es más importante que la altura de la temperatura.

Lo que puedes hacer.

Si tu bebé tiene más de tres meses de edad, dale paracetamol para reducir la fiebre o el malestar si lo deseas. Nunca le des una aspirina a un bebé. Los baños calientes también bajan la fiebre en los niños, siempre y cuando no les den frío y comiencen a temblar. Los temblores significan que el cuerpo en realidad está aumentando la temperatura que es lo contrario de lo que quieres.

Qué le debes decir a tu médico.

Vigila de cerca la temperatura de tu hijo. Si te preocupas o si parece enfermo, infórmaselo a tu médico.