Cuidados para la piel de un recién nacido: eccema y piel seca del bebé

¿Quién no se ha preocupado por la piel seca en algún momento u otro? Y, ¿quién no se ha puesto gran cantidad de cremas y lociones para combatirla? La piel seca es una queja universal. Y las personas que viven en climas secos o tienen antecedentes familiares de piel seca tienen, incluso, más motivos para quejarse.

Si bien puede ser incómodo, la piel seca es más una cuestión de vanidad que de salud. A veces, sin embargo, la piel excesivamente seca puede picar, lo que puede llevar a un círculo de picazón y rascado, y puede derivar en infección cutánea secundaria o cicatrices.

Las circunstancias sobre el eccema, o dermatitis atópica, se asocian muchas veces con la piel seca; de hecho, es la afección más común de picazón en la piel en niños. Generalmente comienza cuando el niño es un bebé, pero puede comenzar cuando es niño o en los primeros años de la edad escolar. El eccema (manchas rojas y escamosas en la piel que pican mucho) aparece más comúnmente en niños con antecedentes familiares de eccema u otras reacciones alérgicas, incluida el asma y la rinitis alérgica.

Los bebés tienen eccema más comúnmente en la cara, las piernas y los brazos. En niños pequeños o niños más grandes, aparece comúnmente en los pliegues de las rodillas y codos. La picazón puede ser bastante intensa y muchas veces perturba el sueño de los niños afectados. La picazón también sirve para continuar el ciclo, ya que rascarse lleva a tener más áreas de la piel rojas y con picazón, y también puede derivar en infección secundaria con bacterias o virus.

Tratamiento de piel seca y eccema El tratamiento más importante (y medida preventiva) para la piel seca y el eccema es mantener la piel bien hidratada. Baña a tu hijo todos los días en agua tibia durante no más de 10 minutos, y luego de esto aplica un humectante espeso para hidratar la superficie de la piel.

Una buena hidratación incluye ungüentos grasosos como vaselina y cremas espesas. Las cremas más efectivas vienen en potes; si puedes verterla desde una botella, no será tan efectiva. Bañar durante períodos extensos puede secar la piel y empeorar las cosas. Los niños con eccema muchas veces también se tratan con ungüentos esteroides tópicos que los pediatras o dermatólogos les recetan. Estos ungüentos ayudan a reducir la inflamación y picazón, y funcionan muy bien cuando se utilizan con un humectante. Los antihistamínicos también ayudan a aliviar la picazón y, en ocasiones, es necesario usar antibióticos si la piel se infecta.

Otras estrategias útiles para la piel seca y el eccema incluyen el uso de humidificadores en el dormitorio del niño, evitar lana y fibras sintéticas en ropa, y usar detergentes y jabones sin perfume. Aunque actualmente no hay cura para el eccema, los medicamentos nuevos siempre pasan por una investigación para probar seguridad y efectividad. Además, aproximadamente el 60 por ciento de los bebés superan el eccema antes de su tercer año, y entre el 85  y el 90 por ciento antes de la adolescencia.

Afecciones relacionadas. Muchas afecciones relacionadas con la piel seca pueden aparecer en pacientes con eccema. La ictiosis vulgar es un tipo de descamación en forma de polígonos que, generalmente, se encuentra en la parte inferior de las piernas. Piensa en lo que sucede cuando se seca un charco de barro y se agrieta. Laqueratosis pilar es una afección habitual que se caracteriza por bultos ásperos en la piel (similares al papel de lija) en la parte superior externa de los brazos y muslos, y en los bebés, en las mejillas. Estas dos afecciones tienden a empeorar en invierno y mejorar bastante en verano. Lapitiriasis alba consiste en manchas blancas en la piel de las mejillas y, generalmente, es más notorio hacia finales de verano porque las áreas afectadas se broncean menos que la piel de alrededor. Se pueden producir manchas blancas cuando el eccema leve de esas áreas cicatriza, lo que deriva en la pérdida temporal del pigmento. El tratamiento de todas estas afecciones consta principalmente de una buena humectación de la piel. Los humectantes especiales que contienen alfa-hidroxiácidos pueden ser útiles para la ictiosis y queratosis pilar, y el uso regular de protectores solares puede hacer que las lesiones de pitiriasis alba sean menos notables. Todas estas afecciones pueden mejorar a medida que el niño crece, pero a veces persisten en la adultez.